La confirmación de la identidad de los huesos encontrados en una granja en la región sur de Goiás trajo un trágico desenlace para la familia de Dayara Talissa Fernandes da Cruz, de 21 años. El examen forense confirmó que los restos pertenecen a la joven, que fue reportada como desaparecida a finales de febrero.
De acuerdo con la información de las investigaciones, el esposo de la víctima, Paulo Antônio Herberto Bianchini, es señalado como el principal sospechoso del crimen.
Dayara desapareció entre finales de febrero y el 10 de marzo, período en el que Paulo registró su desaparición recién el 25 de marzo.
Sin embargo, las contradicciones en sus declaraciones llevaron a la policía a considerarlo sospechoso, lo que culminó con la obtención de órdenes de registro e incautación.
Paulo Bianchini se entregó a la policía el 1 de julio y ha estado detenido desde entonces.Su abogado dijo que la entrega fue para colaborar con la Justicia y que impugnará lo que calificó como «inconsistencias» en la investigación policial.
«El abogado Dr. Divino Diogo afirma en una nota que presentó a su cliente Paulo Antônio en la comisaría de Vianópolis en la tarde del 1º de julio, con el fin de colaborar con la justicia, ya que había una orden de captura emitida en su contra. El abogado también afirma que por la vía procesal rechazará las inconsistencias contenidas en la investigación policial, que se basan en pruebas únicamente por el vínculo afectivo entre Paulo y la víctima. El objetivo es probar en juicio la negación de autoría del acusado», dice la nota de la defensa.
Paulo estaba muy celoso
de que la familia de Dayara, originaria de Mato Grosso, rindiera homenaje en el lugar donde se encontraron los restos, encendiendo velas en su memoria.
Sus familiares aseguran que el sospechoso de haber cometido el crimen era celoso y violento, tanto así que la víctima fue encontrada varias veces con moretones en el cuerpo. La relación fue tumultuosa, con frecuentes separaciones y reconciliaciones.
Paulo cambió su versión de la desaparición de Dayara varias veces, inicialmente afirmando que la había dejado en una estación de autobuses y luego cambiando el lugar del incidente.
La actitud de Paulo de bloquear el contacto con la familia de Dayara también generó sospechas adicionales en su contra, lo que intensificó las investigaciones sobre el caso.
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