Una proporción del 19,8% de los jóvenes de 15 a 29 años en Brasil, es decir, uno de cada cinco, no estudió ni trabajó en 2023, según la Encuesta Nacional Continua por Muestreo de Hogares (PNAD), divulgada este viernes (22), por la Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
En números absolutos, había 9,6 millones de personas en esta situación. El estudio encontró que, por otro lado, el 15,3% de los jóvenes trabajaba y estudiaba, el 39,4% solo trabajaba y el 25,5% solo estudiaba.
La proporción de jóvenes que no trabajaban ni estudiaban disminuyó en comparación con 2022 (20%) y 2019 (22,4%). «Esta población que ni estudiaba, ni se titulaba, ni trabajaba ha ido disminuyendo porque, en los últimos años, hemos tenido un mayor aporte de jóvenes en la fuerza laboral. Esta población se ha reducido más a través del mercado de trabajo que necesariamente a través de la educación», explica la investigadora del IBGE Adriana Beringuy.
El porcentaje de jóvenes que no trabajan ni estudian es aún mayor entre los jóvenes de 18 a 24 años, el grupo de edad apropiado para la educación superior: 24%, es decir, aproximadamente una de cada cuatro personas. En este grupo, el 18% estudiaba y trabajaba, el 39,4% solo trabajaba y el 18,6% solo estudiaba.
Entre los de 15 a 17 años, el 11,3% trabajaba y estudiaba, el 2,3% solo trabajaba, el 81,2% solo estudiaba y el 5,1% no hacía ninguna de las dos cosas. Entre los 25 y los 29 años, el 13,8% trabajaba y estudiaba, el 59,2% solo trabajaba, el 4,8% solo estudiaba y el 22,3% no hacía ninguna de las dos cosas.
«De los 15 a los 17 años, la principal disposición es no estar trabajando y estar estudiando, lo cual es bastante deseable. De los 18 a los 24 años, esta situación de solo estudiar baja significativamente y aumenta la condición de solo trabajar. El trabajo comienza a competir con los estudios en la vida de este joven. Pero también hay una condición creciente de que una persona no está trabajando ni estudiando. Finalmente, de 25 a 29 años, tenemos casi el 60% de las personas totalmente enfocadas en el trabajo», dice la investigadora del IBGE.
El
PNAD Continuo mostró que 24,9 millones de jóvenes de 15 a 29 años sin educación superior completa no estudiaron, no tomaron un curso vocacional o realizaron un examen de ingreso preuniversitario.
En relación a los cursos técnicos y normales (enseñanza) en el nivel de enseñanza media, el 9,1% de los estudiantes de secundaria estaban realizando este tipo de calificación profesional.
Entre los que ya habían terminado el bachillerato pero no fueron a la universidad, el porcentaje de personas que buscaron profesionalizarse a través de estos cursos fue de 5,3%.
